Contagiado
por la reciente fiebre conspirativa de las tesis doctorales he
tenido que echar mano de mi preferida para, despues de bastantes
años, analizar de nuevo una de las más importantes de
nuestra Literatura: La Tesis de Nancy, del escritor español
Ramón J. Sender, Premio Nacional de Literatura (1953) y que
como tantos otros tuvo que marcharse al exilio en
donde falleció en 1982 (San Diego - USA) después de impartir la
docencia como profesor de Literatura en varias universidades.
Nancy
es una muchacha norteamericana que llega a Andalucía a elaborar su
tesis doctoral sobre la cultura española, en una época en que este
país vive anclado en sus tradiciones; se relaciona con los
personajes más típicos y cuenta regularmente a su amiga Betsy, de
Pensilvania, sus impresiones personales sobre las costumbres
sociales, de una manera muy original, simplista y a veces
tergiversada, siempre bajo el prisma de una chica pragmática y un
poco despistada. Sus limitaciones linguísticas y la convivencia con
expresiones que no figuran en el diccionario a las que da una
interpretación “sui géneris” las llevan a unas conclusiones
simpáticas y originales.
A
los expertos en análisis de tesis no debiera faltarle este libro en
su biblioteca porque además de reirse a carcajadas con su lectura,
ayudaría a entender muchas actitudes del pasado que perviven,
mientras se presume de modernidad, en nuestro ideario colectivo.
La
Tesis de Nancy no creo que figure en los archivos de ninguna
universidad, aunque seguro que en todas las bibliotecas de las
facultades de Lengua y Literatura, y los otro cuatro libros de J.
Sender sobre las andanzas de esta chica que alcanzó el grado de
“Doctora en Gitanería”.
Pero en este berenjenal doctoral debiera recomendarse uno de los
libros más importantes del mismo autor: REQUIEM POR UN CAMPESINO ESPAÑOL, una gran obra de la Literatura cuya lectura sería un
toque de atención sobre las más variadas frivolidades que se
observan en el panorama político español. La historia de Paco
el del Molino, que vive en un pueblecito aragonés, serviría
para aclarar muchas cosas de nuestro pasado que a nadie dejaría
indiferente.
…. Lo buscaban en los
montes,
pero no lo han
encontrado;
a su casa iban con
perros
pa´que tomen el
olfato;
ya ventean, ya ventean
las ropas viejas de
Paco.
![]() |
J.M.L.T. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario